PATERNALISMO SIN PAPÁ

Hace algunos días que leí un artículo publicado por Lázaro Barredo titulado: "Él es paternalista, tú eres paternalista, yo soy paternalista…" en el ¿periódico? Granma y reconozco que me llamó la atención poderosamente y que he estado tentado de escribir este post desde entonces pero por causas personales lo he ido postergando hasta el día de hoy. Este señor que se hizo conocido para el público cubano cuando el conflicto de Elian y que era integrante de esas abominables mesas redondas que tanto asco provocaron en la población cubana al acaparar el horario nocturno de la televisión cubana y que, en muchas ocasiones, se alargaban hasta bien entrada la noche obligando a una buena parte de la población a ver su novela en un horario atípico. Este señor que infringía comentarios y "chistes" tan pesados como su propio carácter se empeñó en escalar posiciones en la política cubana al emitir sus comentarios mas ¿agudos? cuando el tirano visitaba los estudios y que, como todos los participantes de la mesa redonda, se les caia la baba y se apresuraban a ofrecerle algún dato cuando el dictador lo solicitaba es quien en días pasados sacó este artículo que, una primera lectura para una persona ajena a la problemática cubana le parecerá una aguda crítica al gobierno cubano y a sus funcionarios e instituciones. Pero para quienes hemos padecido de algún modo el sistema socialista cubano nos damos cuenta de el verdadero sentido de este trabajo periodístico que no es otro que lanzar una cortina de humo para generar comentarios y de esta manera conocer el verdadero punto de vista del cubano de la calle. Pero antes de explicar cuál es el verdadero rostro de este trabajo periodístico es mejor analizar los principales aspectos que este señor propone y las ideas que sugiere para la normalización de la economía cubana y el mejoramiento social que, según este periodista, generará tal hecho. En el mismo comienzo del trabajo Barredo nos obliga a creernos que el estado necesita por obligatoriedad caer en la racionalidad y el sentido justo de la economía como única premisa para salir de la crisis en la que se encuentra y que para ellos los cubanos no pueden aspirar a más sino se hace una evaluación objetiva para encontrar las medidas correctas y que para ello es necesario ver la realidad y actuar sin optimismo infundado. Veamos este interesante punto: El primer error que comete este periodista es el de creer que en el sistema socialista está la salvación, en creer que un sistema tan arcaico y cerrado puede encontrar las soluciones para sobrevivir fuera de su habitad o lo que es lo mismo la imposición de ideas como medio de supervivencia. Pero eso es entendible si comprendemos la ideología que defiende el ponente, sea por convicción o por motivos de conveniencia. Ese mismo error recurrente a lo largo de su trabajo es quien lo obliga a cometer varios errores en el mismo. El ponente se empeña en especificar que el estado debe encontrar las medidas correctas para romper con las ataduras que lo mantienen en la crisis económicas pero no insta al gobierno a romperlas sino que se dedica a mostrar la culpabilidad de todos los ciudadanos y se empeña en intentar que todos los cubanos deben ver la realidad con objetividad y actuar sin optimismo infundado. Craso error porque todos sabemos que la sociedad cubana vive de los optimismos infundados, basta leer los periódicos o escuchar los noticieros en la Isla para enterarse de que la producción mejora cada día, incluso en aquellos penosos días del periodo especial en los años noventa, la producción siempre estuvo creciendo y el país como tal no ha dejado de crecer con esas tasas que nadie se explica de donde salen porque un país que crece con una tasa del 6.5 porciento no puede retroceder en su nivel social y tampoco puede caer en una crisis a menos que las tasas sean infundadas o se despilfarren los recursos del país. El estado se ha empeñado en hacerle creer a todos que es una sociedad justa, que es una sociedad en un crecimiento social y económico constante y busca en un culpable principal la causa para borrar toda las culpas que realmente recaen sobre el sistema político de la Isla y a otros culpables subjetivos el empeoramiento del sistema social lo cual lo convierte en un profesor de la sociedad actual. No se le puede pedir a un cubano que vive en la Isla que vea la realidad con objetividad y actue sin optimismo infundado cuando el propio sistema vive e impone sus mentiras sobre el crecimiento de la economía de la Isla. Es idiota pensarlo solamente porque se necesita, se deben tomar medidas para que no ocurra pero estas medidas van contra el propio modelo socialista lo cual lo convierte en un simple comentario al margen porque de sobra es conocido que jamás se aplicaran estas medidas. Ni siquiera la ex Unión Sovietica se salvó de estos cambios porque cuando intentaron ser objetivos al publicar la triste realidad del país mucha gente comprendió que habian sido engañados por muchos años lo cual fue una de las causas directas de la desaparición del sistema socialista de ese país. Otra de las sugerencias que propone este periodista es el fortalecimiento del estado para lograr formas de prestaciones más ágiles y directas en pequeños servicios. Estas sugerencias son:

• Institucionalidad
• redimensionamiento de la economía
• Organización del trabajo
• Supresión de la doble moneda
• Estimulación salarial
• Cobro de impuestos
• Eliminación de subsidios
• Revisar y eliminar gratuidades

La institucionalidad de un país ayuda al crecimiento económico de la sociedad si esta institucionalidad está fundamentada en el respeto de la sociedad, en la aplicación de la ley basada en la legalidad internacional, a que me refiero: un gobierno puede imponer una ley que prohiba la creación y participación de partidos opositores en la sociedad y dentro del país será legal pero casi todos los países del mundo a través de la ONU son signatarios de un compromiso internacional de respeto a las leyes comunes que son derivadas del respeto a las garantias individuales según la carta de la ONU y la carta magna de los Derechos Humanos lo cual convierte en inconstitucional este tipo de leyes creadas para imponer la voluntad de un partido o grupo social sobre el resto de la sociedad. No sé a que se refiere este señor con institucionalidad porque a lo que significa en realidad no es. La planificación de la economía es un fracaso desde su fundación. Un país no puede controlar el 100 porciento de su producción. El estado puede regular las exportaciones y controlar el crecimiento económico al instaurar medidas que regulen o estimulen la economía nacional, pero no ha funcionado jamás que el estado sea el gran magnate, que el estado sea un ente monopólico que quiere imponer el ritmo de la producción. Es de sobra conocido que el modelo capitalista no es el modelo a seguir para las generaciones futuras, pero es quizás el único modelo economico vigente que aporta beneficios a los países. Es cierto que en muchos de ellos una mala política de los partidos gobernantes y la mala interpretación de la ley ha traido consigo la aplicación de modelos economicos que han dañado las economías. Estos errores no son aplicables a un sistema como erroneamente se hace sino a la conducta de los partidos gobernantes lo cual no ocurre en el socialismo ya que este sistema tiene por premisa adueñarse de la sociedad y de su economía lo cual no permite la apertura de la sociedad porque su fundamentación se aplica en el control de la producción no como fin económico sino como fin social. El control social a través de la necesidad, a esto me refiero: la dependencia social a un gobierno porque es el único suministrador de sus necesidades básicas, de esta forma el estado abre o cierra la producción para controlar la conducta de la sociedad, para crear un dominio sobre lo que desea imponer: me sigues obtienes mejoras en tu nivel social, te opones y se reducen las posibilidades. Ese es el verdadero sentido de la doctrina socialista y ese es el motivo por el cual ejercen el control total de la sociedad lo cual es contraproducente con el desarrollo económico de un país. La organización del trabajo es una mera justificación de la sociedad socialista para mantener a la gente en la creencia de que una mejor organización trae mejores beneficios, lo cual si retomamos la idea del párrafo anterior tenemos la conclusión de que una sociedad no avanzará economicamente solo con la perfección de su fuerza laboral. Se necesita la estimulación económica a las empresas privadas, la estimulación a los pequeños capitales para que se mantengan activos y no crear un cerco sobre las iniciativas con medidas de control absurdas que eviten el crecimiento social a través del capital privado. Una sociedad donde se mezcla el capital privado y el capital estatal, donde se establecen medidas que ayuden el crecimiento genera un camino donde la economía se desenvuelve correctamente. La mala aplicación de estos conceptos y la mala regulación traen consigo las crisis. Es sencillo de entender y resulta imposible de aplicar en un sistema socialista porque cambiaría su concepción en casi su totalidad. La supresión de la doble moneda es una medida que la tiranía jamás tomará porque echaría por tierra un negocio montado sobre las necesidades de la población. Me explico: El régimen de la Habana tiene desde finales de los ochenta toda una empresa montada sobre las remesas que reciben los cubanos. Empresas que adquieren bienes de uso común a precios normales y que luegon venden en sus tiendas con un 350 porciento de incremento lo cual es abusivo. Según datos que circulan en internet la tiranía se beneficia de un 72% de cada dólar que entra al país por concepto de remesas y de 41% de cada dólar que entra al país por concepto de turismo lo cual da la medida de que la tiranía jamás abolirá la segunda moneda. Hacerlo significaría perder un 20% directo de todas las monedas fuertes que entran al país sin invertir un centavo para su recaudación y de un 36% porciento promedio de todas las divisas por concepto de inversiones indirectas y de otro 22% por inversiones directas lo cual es un excelente negocio para la tirania. Yo se que usted se preguntará por qué si tienen tan buen nivel de ganancias tan solo de las divisas por qué no hay cambios ni mejoras. Es sencillo, las mejoras en estos tiempos no son una medida a tomar en cuenta por el tirano. Él sabe que las mejoras sociales traerán cambios en la sociedad, y estos cambios por si solo removeran su poder pues la propia fuerza de la sociedad se encargará de eliminar sus lastres tal como ocurrió en la antigua Unión Sovietica. No se trata de mover las cosas para demostrar se trata de cambiar la raíz del problema que está afectando la sociedad. Los cambios tibios que está haciendo la tirania en estos tiempos y que muchos ya tildan de lentos son los únicos cambios que harán en esa sociedad. Un cambio más radical es el fin de la sociedad socialista y ellos lo saben. Los últimos tres aspectos se unen de manera muy directa y sensible. Los impuestos son diseñados en una sociedad para obtener fondos para poder cubrir los gastos generados por los gobiernos. Estos gastos no se centran solo en los gastos operativos sino que se extienden a los gastos de inversión en el mejoramiento social de una sociedad. Mucha gente ve con mala cara los impuestos porque en gran medida terminan en el pago de suntuosos salarios y lujos de sus gobernantes y un escaso porciento termina realmente en la sociedad. Una sociedad como la cubana no debe cobrar impuestos porque toda la ganancia se genera desde un solo dueño y sería devolverle parte de la riqueza generada de manera individual al propio ente que la canaliza. Es absurdo. Las sociedades generan estos impuestos sobre las empresas privadas y los individuos que obtienen ganacias para obtener parte de las mismas en beneficio de la colectividad. No siempre se aplica de esta manera pero es la forma correcta de crear una medida de impuestos y hacerlo en Cuba, como ya dijimos anteriormente es un absurdo y un abuso de poder. Los subsidios que mantiene la tiranía para con la sociedad son equivalentes a sus medidas de control. No puedes mantener elevados precios de ventas en productos de alta necesidad sin que se genere la protesta y las movilizaciones populares, la tiranía lo sabe asi que estos subsidios de los cuales se está quejando el periodista dificilmente sean modificados, para hacerlo sin que la afectación llegue a remover la estructura de poder se necesita una mayoría popular que ya hace mucho dejaron de tener. En Cuba no existen las gratuidades desde hace mucho: las dos más comunes y más usadas por la tiranía son la salud y la educación y todos los cubanos sabemos que no son nada gratuitas ya que la educación, como todos sabemos, se utiliza para adoctrinar a todas las generaciones. En los primeros años de la revolución se empleó un adoctrinamiento basado en el nacionalismo geográfico, pero en los ochenta se empleó un adoctrinamiento inverso que radica su fuerza en la apatía por la política y en el convencimiento de que no hay más futuro que el del socialismo lo que crea un sentimiento de repugnancia por la política y que enfoca a la juventud en aspectos banales como medio de evasión. La medicina se emplea como medio de apoyo al sistema: o sea la cara noble de una sociedad que vive de la apariencia y por otra parte es una consecuencia generada por la politica de control social, pues de esta manera se controla a una sociedad ya que la comida y la salud son las preocupaciones directas de los seres humanos y controlarlos a través de ellas evitan los cambios que haría de manera normal una sociedad no controlada. El periodista insiste en culpar a la gente con su paternalismo y su apatía política o sobre la sociedad de los errores y sus soluciones, por ello recalca que se necesita comprensión por parte de todos e insiste que a pesar de los problemas sociales generados por los desastres naturales y la crisis global, raro que no hubiese incluido el bloqueo como culpable, los cubanos deben trabajar con más conciencia y no cerrar los ojos a las malas prácticas pues este "paternalismo" que es como cataloga la concientización de la sociedad cubana aprendida de las mismas estrategias impuestas por el gobierno para controlar la sociedad, lo cual es incomprensible de como se puede abrir los ojos y criticar en un país que cualquier critica es tomada como una disidencia y por ende tomada como una medida contra la sociedad, trayendo consigo la cárcel o la marginación de la sociedad. Yo recuerdo el caso de un ingeniero, no recuerdo su nombre, que se opuso a la construcción de una represa en el sur de la Habana porque se percató de su inoperancia y quiso evitarle el gasto a la sociedad en su inversión, propuso su contrucción en otro lugar más operativo pero no le hicieron caso, al insistir fue sacado de su empleo y se le prohibio salir al extranjero donde también daba clases como catedrático invitado en Europa. Tuvieron que pasar algunos años y todo el gasto de recursos para que se comprendiera realmente que la contrucción de esta represa era un desastre, pero no. Nada pasó, no culparon a nadie, nadie se disculpó y este señor tuvo que emigrar al exterior porque fue marginado de una sociedad a la que quiso aportar sus conocimientos. Como el anterior han sido muchos casos y yo le pregunto a este periodista para qué le pide a la gente que discuta los problemas de la sociedad a camisa quitada si todos saben que esa camisa quitada trae problemas. En su trabajo este periodista habla de la eliminación de los comedores populares o los comedores obreros y justifica su eliminación con el hecho de que la sociedad no puede aguantar el ritmo de gasto de divisas para adquirir comida que al final termina en una buena parte en la basura o en el mercado negro. Hasta cierto punto tiene razón, pero omitió el hecho de que el estado quiso ahorrarse 40 centavos de dólar por cada ración de alimentos y que en su defecto le aumento 70 centavos a cada persona afectada para la alimentación. Es preferible semi botar 40 centavos que no gastar 70 para ahorrar 40. Es absurda la planificación y las medidas que se toman pero son tomadas por el mismo peso de la sociedad que quieren imponer. Si quitan los alimentos asi porque si entonces comienza el descontento y en estos tiempos dificiles la tiranía opto por no aplicar una medida extrema pero al buscar la solución no calcularon que les salía más cara que el problema lo cual demuestra la incompetencia del régimen en materia económica. Este señor tambien habla de la libreta de racionamiento o abastecimiento que tienen casi todos los cubanos que viven en la Isla y digo casi todos porque hay una pequeña casta de privilegiados que ni siquiera la han visto nunca. El periodista nos refiere que esta medida fue impuesta para lograr una justicia social pero que siempre ha sido una medida errónea, lo cual es cierto pero no profundiza en el tema y nos podemos percatar que esta mención a la supresión de la targeta de racionamiento fue empleada por el periodista por encargo pues la dictadura está sondeando a la sociedad sobre el impacto que puede generar la eliminación de esta medida. Para justificar su aparición en este artículo le encaja una reflexión muy interesante que reza: "La libreta de abastecimientos fue una necesidad en un momento determinado, con sus actuales atributos se convierte en una impedimenta dentro del conjunto de decisiones que la nación tendrá que asumir, lo cual habrá que resolver no por decreto, sino con las medidas económicas que protejan y garanticen el acceso de las personas de bajos ingresos a esa canasta básica y estimule al resto a trabajar para obtener beneficios salariales a partir de los resultados ..."

Cualquiera que no conozca el ámbito nacional cubano pensaría al leer lo anterior que la libreta de abastecimiento es una impedimenta para el estado y visto así es cierto, pero si no se profundiza en su problemática jamás se podrá entender por qué es una impedimenta y por qué no puede ser eliminada como lo propone el periodista o sea cubrir las necesidades de esta canasta básica a los más necesitados y obligar mediante estimulos al resto para obtener beneficios salariales mejores. No es tan simple la solución. La dictadura debe crear una red de abasto que suprima la actual. Debe crear reservas para evitar el desabasto del mercado y por supuesto ejercer un control sobre los precios. No se puede manejar diferentes precios para el mismo producto porque genera especulación. Se debe fijar un tope en los precios para los productos de primera necesidad y evitar el mercado negro, lo cual resultará dificil para la tiranía pues es de sobra conocido que ellos controlan el 70 porciento de este mercado y es bastante lucrativo para ellos pues ademas de los beneficios económicos controlan las necesidades reales de la gente haciéndoles llegar los productos que dificilmente se consiguen en los mercados estatales. Esta sería una tibia solución al estilo socialista. En realidad todos sabemos que la solución a este problema está en permitir que la gente genere nuevos negocios, que las inversiones privadas se encarguen de este mercado y el estado ganará al no tener que invertir recursos en abastecer solo recibir los recursos que le corresponden a través de los impuestos. Para resumir este periodista hace recaer la culpa del estado en que se encuentra la sociedad cubana sobre la gente y no sobre el verdadero culpable que es la tiranía. Es incomprensible que no se detenga ni un solo segundo en solicitarle al estado que cambie los mecanismos sino que le pide un cambio a la gente para que el estado adopte los cambios que se necesitan. Es por lo anterior que se entiende que este artículo fue expresamente dirigido a generar un sentimiento de debate sobre la eliminación de la libreta de abastecimiento y sobre algunas "gratuidades" que ofrece la tiranía y que le están estorbando en su desvencijada billetera. Sea cual sea la realidad de este trabajo periodístico lo realmente cierto es que el periodista no tuvo ni siquiera la sensibilidad de entender el contorno que le rodea y que prefiere, de manera altanera, mostrar su miserable visión de culpar a todos de los problemas generados por un sistema social que no busca otra vía para satisfacer sus "gloriosas conquistas" y que sabe que si cambia sus bases naufraga en la página de la realidad, o sea desaparece de su existencia por su propio peso.